El cielo negro estaba totalmente claro, se podían observar todas las estrellas y constelaciones desde aquel viejo Santuario, una joven de piel clara y cabello castaño largo se acercaba al templo más imponente de todos, vestía una especie de armadura blanca que cubría su pecho, un lienzo también blanco que atravesaba su cuerpo en diagonal y ondeaba con el viento y una especie de corona en su frente, la joven entro al templo y en una gran puerta custodiaban dos jóvenes con vestimentas similares pero llevaban mascaras que parecían antifaces.
-Ha tardado mucho Señorita Diana.-Dijo uno de ellos.
-Vine lo más rápido que pude, ¿La Princesa esta dentro?-Pregunto Diana.
-Sí, nos pidió que la esperáramos a usted aquí.-Dijo el otro.
-Entonces ya pueden irse.-Dijo Diana.
-Si.-Respondieron ambos y se retiraron.
Diana abrió la puerta y llego a una sala enorme, no era un lugar ordinario, la sala sería completamente negra si no fuese por los puntos brillantes, las estrellas y galaxias que la iluminaban, todo el lugar parecía ser un mapa en miniatura del universo. Pero a pesar de eso se podían distinguir las siluetas de las columnas, el techo y las paredes, y delante de unas enormes escaleras y al final de ellas un trono, en donde estaba sentada una mujer.
-Perdón por la tardanza.-Dijo Diana arrodillándose.-Vine lo más rápido que pude.-
-Te disculpo, solo porque tu misión era muy importante, dime lo que has visto hasta ahora.-
-Si Princesa, parece ser que sus sospechas eran reales, su hermana lo había planeado desde el principio, era consciente de todo cuando decidió romper el equilibrio que los dioses dieron al mundo.-
-Ya veo, dime más detalladamente que ha pasado.-
-Si, al parecer otro de sus hermanos, Ares intento vengarse de ella, y tomo el cuerpo de un hombre llamado Géminis Saga, uno de los Doce Santos de Oro, pero fracaso, otro de ellos llamado Sagitario Aioros logro evitarlo, su hermano inicio una guerra interna en el Santuario la guerra cobra la vida de la mayoría de los Santos, pero al final uno de ellos derroto a su hermano.-
-¿Quién se atrevió a hacer eso?-
-El nombre de esa persona es Pegaso Seiya.-
-¿Has dicho Pegaso?-
-Si Princesa, ese hombre al parecer no solo derroto a su hermano, también fue quien ayudo a su hermana a llevar a Poseidón al sueño eterno para que nunca despertara, y fue él quien hirió de gravedad al Emperador Hades.-
-Eso no me sorprende en nada.-
-¿Por qué dice eso?, Pegaso Seiya es solo un humano y logro derrotar a tres dioses.-
-Tú no lo sabes Diana, pero Pegaso ha tenido más de un nombre en el transcurso del tiempo.-
-¿Qué quiere decir?-
-Han sido en total con esta van cinco veces que Pegaso, el mismo hombre ha peleado contra Hades, y en tres de esas ocasiones a herido su verdadero cuerpo.-
-¿Tan poderoso era ese humano?-
-Eso parece, ¿Por qué preguntas si lo era?-
-Durante la batalla en los Campos Elíseos, el cosmos de Pegaso desapareció, parece que murió junto a Hades.-
-Ya veo, dime ¿Cómo es que llegaron los Santos a los Campos Elíseos?-
-Su hermana, la Princesa Athena le dio su sangre, además los Santos de Oro resucitaron y destruyeron el Muro de los lamentos.-
-Lo que me has dicho nos será de mucha utilidad, reúne a todos mis siervos a la entrada del templo.-
-Si.-Diana se levanto y salió de ahí.
Al salir vio como la mujer simplemente se desvanecía, rápidamente llamo a todos los súbditos del Santuario en donde se encontraban y les ordeno reunirse en las puertas del Templo.
Ya estaban reunidos por fin reunidos todos.
-Señorita Diana, ¿Qué sucede?-Preguntaban varios
-No lo sé aun.-
-Mis queridos súbditos ya es hora de que se preparen para pelear.-La voz de la princesa salía del templo.
-¡Todos de rodillas para adorar a nuestra Princesa, la Diosa Artemisa!-Grito Diana.
-Ah llegado la hora de que me despierte para afrontar a mi hermana menor.-En ese momento Artemisa apareció frente a ellos, pero era diferente a como Diana la había visto, esta vez estaba en su cuerpo real y no era solo su alma.-Athena mi hermana ah cometido el último de sus errores, derroto a mi hermano Ares, puso a dormir eternamente a Poseidón y mato al Emperador Hades, ahora ella controla la Tierra, el Mar y el Inframundo, pero no dejaremos que siga así, sentirá la ira de ustedes mis guerreros del cielo, ahora prepárense, porque destruiremos a Athena y a su querida humanidad, para que así los dioses construyamos un nuevo mundo.-
Todos gritaban y aclamaban el nombre de la Diosa de la Luna Artemisa.
-Diana.-Dijo Artemisa.-Tú te encargaras de hacer cumplir mi castigo, ve al Infierno y captura las almas de los Santos Dorados, quiero que los traigas a todos para que reciban su castigo.-
-Lo hare como lo ordene usted Princesa Artemisa, yo Diana de Luna no le fallare.-
En el cielo se empieza a mover los guerreros de lunares, Artemisa ha despertado y se prepara para acabar con lo que queda de Saori y los Santos ahora que Seiya no está, y los primeros que caerán serán los Santos de Oro a manos del heraldo de Artemisa.
Uchiha Azrael --- FanFics 