El que Puede Vestir la Armadura de Sagitario

-Ese enorme cosmos en la Casa de Sagitario, ¿De quién es?-Pregunto Alexandre.

-Ese cosmos es de Ajiel de Lira.-Dijo Martin.

-Pero no es que un Santo de Plata tenga tanto poder como el de un Santo de Oro.-

Mientras tanto en la Casa de Acuario, Altaír y Zephyr habían sentido también ese cosmos.

-Maestro Cero, ¿Qué ese enorme cosmos?-Pregunto Altaír.

-Antes ese cosmos se sentía débil pero muy fuerte que se sintiera no llegaba a tanto, ahora es tan poderoso como el de usted.-Dijo Zephyr.

-Ese cosmos, indica que un nuevo Santo Dorado ah nacido.-

Mientras tanto en la Casa de Sagitario la pelea se reanudaba.

-Ajiel, ahora eres un Santo de Oro, pero aun así no lograras vencerme.-Dijo Claudio.

-Claudio de Paymon, ahora que tengo la Armadura de Sagitario no me derrotaras.-

-No me hagas reír jamás me derrotaras, ni si quiera tienes tu lira, muere ¡Juicio del Inframundo!… ¿Dónde está?-Ajiel había desaparecido.

-Estoy detrás de ti.-Ajiel había usado su velocidad para aparecer detrás de Claudio.- No necesito mi lira para vencerte.-Entonces Ajiel golpeo a Claudio lanzándolo contra un pilar.-Lysander, cuida de Belén y el Maestro, yo peleare contra Paymon.-

-Pero Ajiel…-Dijo Belén.

-Belén espera, Ajiel tiene razón, ahora que el tiene la Armadura de tu hermano el debe de cuidar esta Casa.-Dijo Lysander.

-Está bien.-

-Ajiel, toma esto puede que lo necesites.- Dijo Lysander y le lanzo a Ajiel uno de sus escudos.

-Gracias Lysander, ahora si Claudio, yo te matare aquí.-

-No dejare que me matas, aunque tengas ese escudo, sin tu instrumento musical no eres nada contra mi.-Claudio concentro su cosmos en su brazo.- ¡Muere, Sentencia del…! ¿De dónde viene esa música?-

-Claudio, ¿Sabes quien fue Orfeo de Lira?-

-Orfeo de Lira, dicen que fue el primer portador de tu Armadura de Plata, murió peleando contra el General Marino de Sirena en la Primera Guerra Santa de Athena y Poseidón.-

-Orfeo, ha sido el más poderoso de los Santos de Lira que han existido hasta mí, el era poderoso porque podía crear la música con su cosmos, transformándolo en tonadas hermosas, el General de Sirena destruyo su lira, y el uso su cosmos para crear la música con la que lo venció, Paymon siente el poder de mi cosmos ¡Acorde Final!-

-¡Ahhh!…Maldita sea, su ataque fue más fuerte que el ultimo.-

-Ya lo sabes Paymon, ahora que visto la Armadura de Sagitario no me derrotaras.-

-Maldito ¡Sentencia del Tártaro!-

En la Casa de Piscis, Cesar no podía creer lo que había sentido en la Casa de Sagitario.

-¿Cómo es posible esto?, el cosmos de Ajiel, se elevo al máximo, alcanzo el Séptimo sentido.-

-Cesar, no deberías de subestimar a Ajiel.-Dijo Miguel.

-Pero Maestro, el solo es un Santo de Plata, no puedo creer que se haya vuelto tan poderoso así nada más.-

-Cesar, recuerdas tus entrenamientos con Ajiel supongo.-

-Si los recuerdo bien.-

Ajiel y Cesar eran más jóvenes, el Maestro Miguel los encontró en las calles de Roma, y los llevo a Atenas a entrenarse como Santos.

-Ahhh.-Ajiel había sido tirado al suelo por Cesar.-Volviste a derrotarme.-

-No te preocupes Ajiel, algún día serás tan fuerte como yo.-

-Cesar.-Dijo el Maestro Miguel.-Ven debemos prepararnos para tu lucha de hoy.-

-Si, Ajiel espero que me estés animando.-

-Lo hare hermano.-Cesar y Miguel se alejaron.

-Cesar recuera, por muy débil que sea tu enemigo nunca lo subestimes, ni siquiera porque sea como tu hermano menor Ajiel.-

-Pero Ajiel no es muy fuerte como yo Maestro.-

-Eso crees mira tú brazo.-Cesar volteo a ver, su brazo sangraba.

-¿Cómo hizo esto?-

Ese día, con el brazo así Cesar se convirtió en el Santo de Piscis.

-Ajiel, hermano, espero que logres sobrevivir, mi hermano menor el Santo de Sagitario.-

Mientras la pelea continuaba en la Casa de Sagitario.

-Ajiel, esta vez no sobrevivirás a mi ataque.-El aura negra volvió a rodear a Ajiel.

-Claudio, tu ataque no me hace nada mira.-

-No puede ser, el aura negra no lo quema, parece que su música…-

-Sí, la música es sonido, el sonido vibraciones, están rodeándome y protegiéndome, ahora siente mi ataque final y muere ¡Nocturno de Cuerdas!-El ataque de Ajiel destrozo el aura negra.

-No puede ser, ¡Juicio del Inframundo!-

-Toma esto.-Ajiel le lanzo el Escudo de Libra haciendo que le ataque se desviara.-Ahora recibe esto, el ataque que mi hermano me enseño ¡Rosas Diabólicas Reales!-

-¡¿Qué son estas flores…Ahhh?!-La rosas lastimaron el cuerpo de Claudio derrumbándolo.

-Ajiel lo logro.-Dijo Atzin.

-Derroto a Claudio.-Dijo Belén.

-Lysander, toma tu escudo.-Ajiel le entrego a Lysander su escudo.

-Gracias Ajiel.-

-Ahhh, Ahhh.-Claudio se trataba de levantar.

-Claudio, veo que aun no mueres, acabare contigo de una buena vez, toma esto ¡Nocturno de…!-

-¡Viento de la Muerte!-

-¡Colisiones Gemelas!-

-¡Ahhh!-

-¡Ajiel!-Ajiel salió volando y callo, el caso y una ala de la Armadura se destrozaron.

-No puede ser, Jazheel de Sedu.-Decía Belén que no podía creerlo.

-Ave del Paraíso, que gusto verte Jajaja.-Dijo Jazheel.

-Entonces él es el hermano de Ares.-Dijo Calista.

-Ajiel no se levanta.-Dijo Atzin.

-Claudio, ahora acabaremos esto matándolos de una vez.-Dijo Jazheel.

-¡Colisiones Gemelas!-

-¡Viento de la Muerte!-

-No dejaremos que los maten.-Dijo una voz.

-¡Kahn!-Los dos ataques chocaron contra la barrera y explotaron.

-Nosotros pelearemos-Dijo Carlo.

-Protegeremos al Maestro Atzin y los otros.-Dijo Quetzal.

Los Berserkers de Plata habían sobrevivido, y los Santos de Oro se preparaban para luchar nuevamente.

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